Por: Rita Isabel

La luna subió y bajó mareas en su ciclo de guiños desde la luna llena que alumbró a Ramonita Letraherida un miércoles 3 de diciembre de 1941. En el inmutable ritmo del pasar del tiempo las mareas bajaron y subieron con el ciclo lunar de guiños en menguante y creciente desde que comenzamos esta celebración de los 80 años de Monín. Hoy, en vísperas de luna nueva, Ramonita posa su mirada en el libro El bosque animado de Wenceslao Fernández Flores que hasta hace unos días leía. Mientras esta voz narrativa teclea la última entrega y repasa lo que ha sido el festejo de mes en mes de tres en tres.
En enero festejamos el rezo y los dones que le dieron nombre: Monín, Ramonita, Ramona.
En febrero develamos el glosario que habita en su memoria.
En marzo la bautizamos como Letraherida.
En abril descubrimos el amor enciclopédico de la pequeña Monín.
En mayo reconocimos, en la joven Ramonita, su universalidad.
En junio afirmamos que la vida, su vida, es narración y en julio que también su vida puede ser una trayectoria búmeran.
En agosto recordamos que Ramonita es poesía.
En septiembre atestiguamos que la palabra perdura y que Letraherida es narración infinita.
Octubre fue un brindis en el lenguaje ent por el entusiasmo que nos infunden las historias que habitan en la abuela Monín.
En noviembre fue víspera, el porqué de los cuándo nos recordó que todo festejo tiene un punto final.
Llega diciembre, el 3 de diciembre, este viernes… hoy, con mirada entusiasta al horizonte mar, al celeste infinito…
Cerramos el festejo de palabras con la última entrega, para comenzar la celebración en la acción. Con nosotros Letraherida toma rumbo hacia el centro de nuestra Madre Isla. Trazamos la ruta desde el corazón hasta donde se cultivan esperanzas para celebrar sus 80 años.
Los festejos también pueden terminar con tres puntos suspensivos y con una invitación a continuará…
y todas las historias tienen la posibilidad de volver a empezar, algunas se leen, otras se escriben y esta se vive.
Hoy celebro, festejamos como familia, la bendición de ser parte de la historia de Ramonita Letraherida. Hoy agradecemos y brindamos con palabras por sus 80 años: ¡feliz, feliz en tu día, Ramonita que Dios te bendiga, que reine la pasa en tu día y que cumplas muchos más!
